Ana Trejos: Camino de Santiago. La exposición


El 12 de octubre del año 2009, luego de tres semanas de emocionantes e inolvidables jornadas de camino, veía por fin Ana Trejos por primera vez la ciudad de Santiago de Compostela, de entre cuyos edificios sobresale la Catedral con toda su belleza.

Casi cinco años después nos acercamos al final de otro camino no menos emocionante: el próximo martes 1 de julio tendremos la inauguración de la exposición de pintura “Ana Trejos: Camino de Santiago”.


La exposición





Fecha: martes 1 de julio, 2014.
Lugar: Salón Dalí, Casa de España. San José, Costa Rica.
Dirección: Sabana Norte. 100 metros este y 150 norte del Edificio del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).
Hora: 7:00 pm.
Presentación musical: dúo “Grosso modo” (Roberto Antillón y Melisa Jiménez).
La exposición estará abierta al público durante todo el mes de julio.


El camino



Hemos intentado enriquecer el camino hacia esta exposición con la obra “Guía del camino para magos y pastores”, del escritor Andrés Marote, hijo de la pintora. La obra, profundamente vivencial (como lo debe ser el andar del peregrino), se inspira en las pinturas y experiencias de Ana Trejos en el Camino de Santiago, así como en las veladas de estudio y meditación del autor con diversos textos bíblicos. El resultado es una colección de escritos que proponen una peregrinación del alma a través de los pasajes del Evangelio y de la Biblia, como si se tratara de un caminante en busca de su felicidad. 

Esta obra se puede leer en uno de los blogs del autor:




También hemos creado una página en Facebook:





La pintora





(Fotografías: Ana Trejos en el libro Camino Sanabrés, de Pepe Sandoval).


Agradecemos el apoyo que hemos recibido, de muy diversas maneras y de muchas personas, en este camino. Esperamos compartir con todos una gran noche, el martes 1 de julio. ¡Gracias!





Pinturas:
Camino en Burgos”; “Ermita y albergue (Palencia)”; “Río Esla”.
Boceto de Ana Trejos, realizado en algún sitio del Camino de Santiago; 2009.
Fotografía de Ana Trejos, en algún sitio del Camino de Santiago; 2011.


Ana Trejos y el Camino de Santiago


(Fotografía de una de las páginas del libro “Camino Sanabrés”, de Pepe Sandoval; presenta a la pintora en algún sitio del Camino de Santiago).

ANA TREJOS Y EL CAMINO DE SANTIAGO

Ana Trejos nació el 26 de octubre de 1943 en San José, Costa Rica. Se enamoró de España desde niña, cuando preguntó a su padre cuál era el país más bueno del mundo, y su padre respondió, sin dudar, “España”. Desde entonces trató de conocer a fondo todo sobre ese país: en casa suya y de sus abuelos maternos abundaban los libros españoles, y su padre tenía muchos discos, y también cantaba él mismo muchas canciones españolas. Gracias a la música, los libros y las películas que llegaban al cine de Costa Rica, fue conociendo la que sería por siempre la tierra de sus amores.
En 1964, con 21 años, viajó por fin a España, para estudiar pintura. Además estudió allí algo de guitarra y danza españolas. Al marcharse, su familia pensó que ese viaje por fin la desilusionaría y la haría poner sus pies en “su” tierra; pero pasó todo lo contrario. Regresó a Costa Rica en 1968, con la intención de regresar a España apenas pudiera, y vivir allí; sin embargo, finalmente se casó e hizo su vida en Costa Rica. Como pintora, ha dedicado gran parte de su arte a los paisajes españoles, junto con los no menos bellos paisajes naturales de su país.
A partir de 1988 ha viajado a España siempre que ha podido. En 2009 cumplió por fin uno de sus sueños: recorrer el Camino de Santiago. Inició el 23 de setiembre en Salamanca, y llegó a Santiago de Compostela el 12 de octubre. En julio de 2011 realizó tres etapas del camino francés: de Burgos a Puente Fitero (Palencia).
Según la pintora:
“El Camino de Santiago ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. Los peregrinos, sean creyentes o no, católicos o no, respetan el camino, y el camino los lleva; todo se facilita. El primer día, luego de recorrer 35 kilómetros, pensé que no iba a poder seguir; y al día siguiente vi que podría. Pasar por los pueblos, ver cómo sus gentes ayudan a los peregrinos con gran disposición, y el placer de caminar por los campos y pueblos de ese pedazo de España…
No me arrepiento de haber ido sola. Aunque conocí gente maravillosa, las mayores emociones las viví los días que iba sola. El paisaje, las vivencias en los albergues…”

Página de la exposición "Camino de Santiago" en Facebook